La Obra de Infancia Misionera es una institución de la Iglesia universal que promueve la ayuda recíproca entre los niños del mundo. Miles de pequeños de los cinco continentes participan en esta Obra Pontificia, que tiene como lema "Los niños ayudan a los niños".

ADELANTE CON LA SOLIDARIDAD…

La Obra de la Infancia Misionera constituye “una verdadera red de solidaridad humana y espiritual entre los niños de los antiguos y nuevos continentes” (Juan Pablo II). Con su oración y su colaboración económica los niños ponen su granito de arena para transformar el mundo con el mensaje alegre y esperanzador del Evangelio y experimentan lo que es ser “pequeños misioneros”.

¿CUÁNDO?

En España, la Jornada de Infancia Misionera se celebrará el próximo domingo 26 de enero, y durante la semana anterior en el cole también nos solidarizaremos.

LOS NIÑOS PROTAGONISTAS…

Basta echar una mirada a nuestro mundo para comprobar la dramática situación que sufren millones de niños, víctimas inocentes en todo tipo de escenarios de violencia e injusticia. Los niños son los principales damnificados en las tragedias humanas y naturales que sufre el mundo.

Para paliar estas necesidades, son los propios niños los que toman la iniciativa y quieren ayudar a otros niños. La Infancia Misionera de España y del resto del mundo –la Obra está implantada en más de un centenar de países-, se pone manos a la obra para que todos los niños y niñas del mundo puedan crecer felices y tengan la oportunidad de oír hablar de Jesucristo como Salvador, y colaboran con aportaciones económicas.

DESTINO DE LOS FONDOS ECONÓMICOS.

Con todos los fondos económicos recogidos, la Obra de Infancia Misionera promueve la creación y el sostenimiento de centros para la distribución de alimentos, casas de acogida para niños abandonados y huérfanos, hospitales para atender a los niños enfermos, escuelas e iglesias donde se transmite la fe.

NOSOTROS TAMBIÉN PARTICIPAMOS.

Los niños y niñas del colegio Nuestra Señora del Remedio, junto con sus familias y profesores, también nos ponemos manos a la obra, pues con nuestro esfuerzo y esperanza deseamos crear sonrisas en las caras de los niños del mundo entero.

EL SEÑOR SE SIRVE DE LAS COSAS PEQUEÑAS PARA HACER GRANDES OBRAS.

Así se ve la acción de Dios. Esta Obra de la Santa Infancia es la prueba viviente de ello.